08 de noviembre de 2021
La viceconsejera de Justicia, Encarnación Vicente Suárez, acude al acto de homenaje a las 18 personas enterradas en la fosa común de San Miguel de la Barreda.
Acto en San Miguel de la Barreda

El pasado domingo, 7 de noviembre, tuvo lugar en San Miguel de la Barreda un acto de homenaje a las personas enterradas en la fosa común de San Miguel, organizado por la Comisión de Amigos y Familiares de Represaliados de la II República "San Miguel de la Barreda". Al acto acudió, en representación de la DG de Emigración y Memoria Democrática, la viceconsejera de Justica Encarnación Vicente Suárez.

En su alocución, la viceconsejera recordó no solo a las personas allí ejecutadas sino también "también a quienes habéis mantenido durante décadas la llama de su recuerdo, y sobre todo de quienes lo hicieron posible en los momentos más complicados, exponiendo su comodidad, su salud e incluso su vida por ello. Por eso, a los herederos de los 18 de San Miguel, quiero dedicar hoy estas palabras porque creo de verdad que tenemos una deuda con ellos y con vosotros: la de la una adecuada reparación moral e histórica que es absolutamente necesaria para la paz, para que la serenidad, y el descanso llegue a todas las personas que aún no han podido disfrutar de ella."

"Por eso, por ellos, por vosotros, por todas las víctimas de la Guerra y de la represión franquista en Asturias, el Gobierno de España y el Ejecutivo regional tenemos el firme compromiso de dar un impulso definitivo a la Memoria Democrática de Asturias y en el conjunto del país, el compromiso de la restitución de la verdad."

Además, la viceconsejera explicó algunas de las acciones que se están ejecutando o están planeadas en relación con la Memoria Democrática, como el trabajo en una serie de fosas, el Jardín de la Memoria, la presentación de una nueva página web, la eliminación de símbolos franquistas, etc.

Cerró su intervención con la cita: "la recuperación de la memoria democrática es una obligación ética, política y también legal de los poderes públicos. Recuperar del olvido a quienes defendieron la democracia y sus valores frente a la rebelión fascista es un imperativo ético y moral que el Principado de Asturias no puede obviar. Los demócratas estamos en deuda con ellos”.